Elaborar currículos, cómo enfrentar entrevistas laborales y el trabajo en equipo marcaron la tónica del primer ciclo de talleres de desarrollo profesional, instancia que buscó potenciar las habilidades blandas dentro del estudiantado.
Mantener vivo el legado de Federico Santa María mediante la ayuda al estudiante desvalido meritorio es el trabajo que la Red de Ex Alumnos USM, desde sus inicios ha logrado llevar a cabo en la Universidad. No obstante, a pesar de conservar viva la tradición filántropa a lo largo de los años, este 2011 se planteó un nuevo desafío, dirigido principalmente a los estudiantes de los últimos años de pregrado.
Es por ello que el Centro de Desarrollo Profesional, organismo que pertenece a la Red de Ex Alumnos USM, organizó un ciclo de talleres enfocados en el coaching profesional, instancia que buscó entregar herramientas técnicas y teóricas
con la finalidad de mejorar sus condiciones de empleabilidad al momento de optar por un trabajo, y así posicionarse en el mercado laboral.
Alimentando destrezas blandas
Las actividades se desarrollaron dentro de los meses de agosto, septiembre y los primeros días de octubre, tanto en Valparaíso como en Santiago. Su gestación estuvo a cargo de Priscilla Torres, coordinadora del Centro de Desarrollo Profesional, quien comentó que “como CDP tenemos la misión de entregar herramientas a los egresados y a los que están punto de hacerlo, con la intención de que ingresen con la mejor preparación al mundo laboral”.
“Como sansanos nos hemos destacado por el contenido técnico del que somos capaces, pero el aprender nuevas habilidades que potencien nuestro desempeño a la hora de encontrar trabajo, se transforma en un plus importante para las empresas”, agregó Torres.
El desarrollo de las actividades en conjunto con los alumnos estuvo a cargo de la sicóloga laboral, Angélica Mondaca, quien fue
la encargada de motivar a los alumnos a dar lo mejor de ellos y potenciar de manera significativa sus habilidades blandas mediante la realización de actividades individuales y grupales. “Mi tarea trató que los estudiantes entraran en un proceso de auto observación respecto a sus brechas y destrezas en cuanto al manejo de habilidades blandas con la intención que mediante actividades lograran potenciarlas”, explicó la experta.
En el mismo contexto añadió que, “para lograr los objetivos, la actividad fue eminentemente vivencial, en donde a través del diseño de situaciones dinámicas, se llevó a los alumnos a abordar temáticas como el trabajo en equipo, liderazgo, lenguaje corporal, comunicación, prejuicios, emociones y simulación de entrevistas sicolaborales”. Asimismo concluyó que los participantes a la actividad generaron vínculos con sus compañeros y lazos de confianza; pero por sobre todo, “lograron vislumbrar sus propias riquezas como futuros profesionales”, concluyó la especialista.
nFinalmente los estudiantes se mostraron agradecidos de la actividad y la catalogaron como una excelente iniciativa que ayuda a desarrollar habilidades, que según ellos mismos se califican como débiles en la materia.
Fuente: UTFSM / Comunicaciones - 21/10/2011
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