Instrumento permite registrar datos técnicos del funcionamiento de una aeronave y tras un accidente se convierte en una de las más importantes pistas para conocer sus causas.
Consideradas por los especialistas en aeronáutica como uno de los mayores avances en la seguridad aérea desde los inicios de la aviación comercial, las Cajas Negras cobran protagonismo tras cada catástrofe aérea, brindando datos relevantes a los investigadores, ayudando así a dilucidar las causas que provocaron algún accidente como por ejemplo, el del vuelo entre Río de Janeiro y París que se estrelló en el Atlántico en 2009, en donde el aparato aún sigue siendo buscado.
Al respecto el Investigador del Centro de Aplicaciones Aeroespaciales (CAA) de la Universidad Técnica Federico Santa María (USM), Rodrigo Suárez, entrega pistas sobre qué es, cómo funciona y qué datos entrega esta misteriosa
herramienta de registro de información.
“En el caso de la aeronáutica, se denomina Caja Negra a un equipo de grabación que registra datos técnicos del vuelo y que se usa para averiguar qué pasó luego de un accidente. Por eso se llama “negra”, pues suele asociarse a un accidente. Normalmente no son negras; sino de un color vivo (naranja) y puede ser una o más, dependiendo de cada modelo de aeronave”, explica Rodrigo Suárez, Investigador del CAA de la Academia de Ciencias Aeronáuticas de la USM.
“Una de sus más importantes funciones es la de grabar importantes datos del vuelo con el propósito de poder reconstituir los momentos previos a un accidente durante la investigación posterior”, añade.
Cabe señalar que estos aparatos están albergados dentro de recipientes hechos con materiales de gran resistencia, siendo aisladas de tal manera que pueden soportar grandes impactos y temperaturas. Asimismo, el dispositivo puede mandar señales electrónicas por bastante tiempo dependiendo del modelo,
llegando incluso a emitirlas desde profundidades de más de 900 metros bajo el agua.
“Esta útil herramienta tiene la capacidad de grabar datos de los computadores de vuelo, permitiendo conocer parámetros como la velocidad, altura, potencia de los motores, posición de algunos comandos de vuelo, presión hidráulica, datos de circuitos eléctricos, cantidad de combustible en cada estanque, posición de la aeronave, entre otros, según el modelo y tipo de cada caja negra, pudiendo también grabar los sonidos del ambiente de la cabina de pilotos, para escuchar secuencias de conversaciones, ruidos extraños o interferencia de terceros, así como revisar las decisiones que tomó la tripulación en cada circunstancia”, señala el Investigador.
En la actualidad, algunos organismos y empresas del área se encuentran desarrollando un nuevo sistema de registro on line, que permitiría en el futuro la trasmisión de todos los datos obtenidos del vuelo a centros de control en tierra, preservando de esta manera los datos
de vuelo y evitando que se pierda información valiosa para la investigación.
Fuente: UTFSM / Comunicaciones - 28/04/2011
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