Trabajo está destinado al diseño e implementación de un sistema inalámbrico para la evaluación energética de distintas localidades y para un sistema convertidor de energía undimotriz.
Contribuir al desarrollo de instrumentos que permitan monitorear el estado del mar y evaluar localidades donde se puedan desarrollar proyectos que buscan aprovechar la energía proveniente de las olas, es el principal objetivo de la investigación desarrollada por Francisco Arenas, Ingeniero Civil Electrónico y miembro del Núcleo de Electrónica Industrial, Mecatrónica y Control de Procesos (NEIM) de la Universidad Técnica Federico Santa María.
Según explica Arenas, su trabajo está destinado al diseño e implementación de un sistema de monitoreo inalámbrico para la evaluación energética de localidades y un sistema convertidor de energía undimotriz. “La investigación consistió en el desarrollo de tecnologías que aprovechan las energías marinas. En particular para la tesis desarrollé una boya para evaluar el recurso energético de las olas”, cuenta el especialista en telecomunicaciones y gestión.
Asimismo, precisa que Chile cuenta con un enorme potencial en energías marinas y además, con una gran infraestructura portuaria, que junto con las características de costa y oleaje favorecen el desarrollo de estas tecnologías. “Todo el potencial energético de las olas podría ser utilizado en sistemas de bombeo de agua o como fuente alternativa de energía en el sector minero por ejemplo, uno de los rubros económicos más potentes para el desarrollo del país”, opina.
En Chile, no hay aún proyectos concretos de conversión undimotriz, pero hay una masa de investigadores y docentes que ven este recurso como algo viable a largo plazo, dentro de los cuales se encuentra su estudio. Aunque el país posee potencial en toda su costa, es especialmente energético en el sur. En este sentido, el objetivo de este trabajo es proveer de información para minimizar incertidumbres en la evaluación de proyectos undimotrices.
“En particular, la exploración de tecnologías que aprovechan la energía de los mares no cuenta con un mercado atractivo donde se puedan acceder a recursos para hacer investigación. Por lo tanto, la investigación nace de la universidad, que es de donde debieran surgir las ideas y personas motivadas para llevarlas a cabo”, considera Arenas, para quien, además, resulta primordial la formación de jóvenes profesionales que puedan fomentar la innovación.
“Es sumamente importante, en un mundo competitivo y altamente dinámico, formar no sólo investigadores, sino también una gran masa crítica, capaz no sólo de encontrar soluciones a problemas de la técnica, sino que también esté dispuesta a crear nuevos problemas y cuestionar las soluciones existentes. Creo que es fundamental cambiar nuestra concepción de ser solamente reproductores de un sistema, ya que es necesario entregar a las próximas generaciones nuevas herramientas y libertades mentales”, sostiene.
Fuente: DIRECCIóN GENERAL DE COMUNICACIONES / Universidad Santa María - 20/11/2012
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