recetas
UTFSM | 2013

“Es suficiente 5 cm de profundidad de agua para que un menor pueda ahogarse”

Rodrigo Domínguez, profesor de la Sede Viña del Mar de la Universidad Técnica Federico Santa María entrega medidas de prevención para evitar accidentes fatales estas vacaciones.

“Es suficiente 5 cm de profundidad de agua para que un menor pueda ahogarse”
Comunicado de prensa

“Es suficiente 5 cm de profundidad de agua para que un menor pueda ahogarse”

La muerte de un menor ahogado en la piscina de un exclusivo condominio de Algarrobo, ha causado conmoción en la población, y es que cada año llegada la época estival es posible escuchar sobre accidentes ocurridos en piscinas, lagos, lagunas y/o tranques.

Es por este motivo que se vuelve necesario que la población, adulta sobre todo, tome conocimiento de los reales riesgos que envuelven estos lugares de esparcimiento.

Al respecto Rodrigo Domínguez, profesor de Prevención de Riesgos de la Sede Viña del Mar de la Universidad Técnica Federico Santa María, entrega algunas recomendaciones que permitirán evitar accidentes fatales.

Dentro de las medidas de prevención que deben tener los adultos, “es clave considerar dos aspectos: las condiciones y las acciones que en definitiva constituyen la fuente del daño. Desde la perspectiva de las condiciones, siempre es conveniente proteger las piscinas, y señalizar zonas aptas y no aptas para el baño en el caso de lagos y lagunas. Por el lado de las acciones, es recomendable que los padres nunca dejen solo a un niño cerca de una piscina, lago, laguna o tranque, que respeten las señales de advertencias de las zonas aptas y no aptas para el baño y conozcan las maniobras básicas de reanimación. Es suficiente 5 cm de profundidad de agua para que un menor pueda ahogarse, porque no puede levantarse”, explica el profesor.

Además es importante que en aquellas casas en las que se cuenta con piscinas se utilice un cerco de más de un metro de altura, idealmente con cerradura, que evite el ingreso de los menores a la piscina sin supervisión.

Pero no sólo las piscinas representan un riesgo, sino también los tranques, lugares que muchas veces son utilizados tanto por adultos como por niños para capear el calor.

Sobre ello Rodrigo Domínguez es claro en advertir que, “la fuente del daño está en la condición insegura de los mismos y la acción temeraria del ser humano. En general, los tranques no son lugares habilitados para el baño, por lo que nada asegura que el fondo no sea fangoso, no tenga piedras entre otros factores de riesgo. Y por el lado de las acciones, destacan las acciones temerarias en estos recintos”, dice el profesor, quien además agrega que en caso de producirse un accidente es importante “practicar maniobras de reanimación, mantener la calma y la del afectado y contactarse inmediatamente con personal especializado”

Finalmente el profesional recomienda, “mantener un incoercible apetito de autocuidado, que implique estar en un constante estado de alerta tanto de las condiciones en las que se encuentra el lugar de recreación, así como también de las acciones que podrían terminar en un accidente”.


Fuente: UTFSM / Comunicaciones - 18/01/2013


Este sitio usa imágenes de Depositphotos