Haciendo uso de Tecnologías de la Información y la Comunicación para la educación, esta inclusiva metodología de aprendizaje a distancia favorece a quienes no tienen la posibilidad de asistir a clases presenciales tradicionales.
En la búsqueda constante por innovar y mejorar la calidad de enseñanza, y como un elemento estratégico de su desarrollo, el Departamento de Informática de la Universidad Técnica Federico Santa María ha establecido el uso de metodologías e-learning para el aprendizaje.
En esa perspectiva es que a partir del primer semestre de 2013, a través de su Área de Extensión, se está impartiendo el primer taller e-learning de la unidad académica. Este perfeccionamiento no presencial está dirigido a docentes-relatores (algunos de ellos académicos), que están dedicados a la formación continua y de profesionales insertos en el mundo laboral que realizan cursos de capacitación y diplomas.
Esta nueva modalidad de aprendizaje resuelve el problema de quienes se enfrentan a la inquietud o necesidad de crecer profesionalmente y que tienen dificultades para asistir tradicionalmente a la sala de clases, ya sea por razones geográficas o de horarios de trabajo. “Cuando una persona termina sus estudios, tiene un título, necesita irse actualizando en la medida que aparecen nuevas tecnologías y conocimientos. Ellos necesitan volver a la universidad con todas las dificultades que implica estar en el mundo laboral”, explica el académico del Departamento de Informática, Luis Hevia.
Agrega además que “nosotros hemos optado por formar a nuestros docentes-relatores en la opción más compleja: la no presencialidad. Al planificar cómo se impartirán las cátedras y cómo se formará a los estudiantes a través del e-learning, uno lo primero que piensa es que esto es solamente una nueva forma de hacer clases, pero en este caso no existen las clases propiamente tal. El desafío entonces es más grande, pues se comete a veces el error de usar metodologías tradicionales para un enfoque que es totalmente no tradicional. Se trata de un paradigma totalmente distinto a aquel con el cual las universidades chilenas, y de casi todo el mundo, han incursionado en los últimos cientos de años”.
Calidad e innovación al servicio de los profesionales
La metodología utilizada para este taller, y que se aplica en varios países del mundo, es comenzar la semana de clases los días martes y terminar los lunes. La razón de ello es que, si una persona no tiene tiempo durante la semana, puede acomodar sus horas de trabajo como más le convenga. Así, la sesión está disponible durante toda la semana para que el alumno pueda llevar a cabo su autoaprendizaje.
La plataforma utilizada es la conocida “Moodle”, que tiene la ventaja de ser abierta y que es utilizada en gran parte del mundo académico. Al respecto, Hevia comenta que “uno podría suponer que esto implica sólo dominar el uso de una tecnología, pero acá también interrelacionamos personas con procesos de aprendizaje en torno a esta tecnología, que es facilitadora de esa relación y con ciertos objetivos organizacionales. Nuestro desafío es justamente incursionar en nuevas estrategias del aprendizaje de nuestros estudiantes. Cada participante tiene valiosas experiencias que, gracias al uso de la tecnología, pueden ser transferidas a sus pares. Es un modelo de trabajo colaborativo interesante que requiere todo un modelo de gestión del conocimiento”.
Para el académico, las posibilidades para desarrollar este tipo de actividades son cada día más. En primer lugar, porque Internet ofrece cada vez un mejor servicio de ancho de banda, permitiendo hacer uso sin mayores problemas de interesantes recursos como los videos. Segundo, los profesores están siendo capacitados en la aplicación de estas metodologías. Tercero, cada vez la necesidad de formación continua de los profesionales es más importante y para ello es necesario acudir a una institución universitaria, pero ya no es obligatorio hacerlo cien por ciento presencial. Y finalmente, hay experiencias positivas que han ocurrido a nivel internacional que permiten afirmar que, efectivamente, es una buena forma de aprendizaje, sobre todo para personas con criterio formado que se dan cuenta de la importancia de aprender, más allá de obtener una determinada nota o sólo aprobar.
Hevia afirma que la meta final es que esta metodología pueda ser aplicada a nivel nacional e internacional. “Actualmente, hay cerca de 30 docentes-relatores que están participando del taller en esta primera versión, que ha sido bien valorada. Ya podrá ser incursionada próximamente por otros profesores y académicos para poder utilizar los beneficios de esta tecnología con alumnos de cursos más tradicionales”, dijo.
Fuente: UNIVERSIDAD TECNICA FEDERICO SANTA MARIA / Comunicaciones - 12/03/2013
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