recetas
UTFSM | 2010

Investigadores USM participan en el choque de protones con más energía

El experimento se realizará en el Gran Colisionador de Hadrones (LHC), alojado en el CERN. Esta sería la antesala para replicar el estado de la materia en los primeros instantes del Big-Bang.

Investigadores USM participan en el choque de protones con más energía
Comunicado de prensa

Investigadores USM participan en el choque de protones con más energía

El martes 30 de marzo comenzará la colisión de protones con mayor energía jamás antes alcanzada. Este será el comienzo de los experimentos que se llevarán a cabo en Suiza, en las dependencias del CERN, utilizando la máquina conocida mundialmente como el Gran Colisionador de Hadrones (LHC). En uno de estos experimentos, llamado ATLAS, participa un grupo chileno de científicos de la Universidad Técnica Federico Santa María y la Pontificia Universidad Católica de Chile.

Al respecto Claudio Dib, uno de los precursores originarios de la participación chilena en estos experimentos y académico del Departamento de Física de la USM, señaló que “el LHC es un anillo circular que tiene unos

27 kilómetros de perímetro, en el que se aceleran protones y otros núcleos atómicos a energías mayores a las alcanzadas en experimentos pasados”.

El académico de la Universidad Santa María agregó que “se pretende que choquen dos haces de protones con una energía inédita de 7 teraelectronvoltios (TeV). En el ámbito de la física, sería el primer paso para comenzar a observar a futuro algunas de las partículas elementales que creemos que existen, pero que nunca las hemos podido ver”.

En ese sentido, Dib dijo que “en estas primeras colisiones del próximo martes no esperamos encontrar nada nuevo aún. Si todo sale bien, se comprobaría que la máquina funciona correctamente y se podría seguir con los siguientes pasos, como aumentar la cantidad de colisiones para poder acumular la gran cantidad de datos que requieren los experimentos. Posteriormente, también se harán colisionar núcleos atómicos grandes, que representarían lo ocurrido inmediatamente después del Big-Bang”.

En búsqueda de la “

partícula divina”

El académico de la Universidad Santa María indicó que “cuando los protones chocan hay partículas que salen disparadas, que acusan qué fue lo que ocurrió en esa colisión. Con eso se puede estudiar cómo es la materia al nivel más básico y fundamental. Estamos hablando de explorar la constitución de la materia a tamaños mil veces más pequeños que un protón, que a su vez son 100 mil veces más pequeños que el átomo”.

“Además de estudiar las interacciones, con la energía del choque se pueden formar partículas que no existen en la naturaleza. Estas partículas seguramente se producen cuando hay choques de rayos cósmicos en la atmósfera, pero decaen rápidamente y en lugares imprevistos, donde no hay posibilidad de detectarlas”, puntualizó el físico teórico. En estos experimentos, las colisiones se hacen justo en el medio de un detector, donde sí se puede recabar información de lo que ocurrió.

Con respecto a las nuevas partículas que se podrían observar más adelante, Dib

sostuvo que “con un aumento progresivo en la frecuencia y la energía de las colisiones, esperamos incluso cumplir el gran sueño de encontrar el Bosón de Higgs.”

El Bosón de Higgs, llamado por algunos “la partícula divina”, es aquella sobre la cual se funda el actual modelo estándar de la física de partículas elementales, pero nunca ha sido observada. Es la pieza clave del puzzle, la responsable de dotar de masa a los componentes más básicos de la materia.

El trabajo de los chilenos

El LHC posee 4 detectores para analizar los resultados de la colisión, e investigadores de la Universidad Técnica Federico Santa María colaboran en uno de ellos. “Existen 4 puntos distintos donde se hacen chocar los haces, y cada uno tiene detectores a cargo de un grupo de físicos experimentales. Chile trabaja en la colaboración del detector ATLAS para la captura y análisis de datos, y probablemente podremos participar en las mejoras que se hagan del detector en el futuro”, señaló Claudio Dib.

El

profesor Dib recalcó que “los experimentos del Gran Colisionador de Hadrones son completamente seguros para las personas, ya que está ubicado a 100 metros bajo tierra”.


Fuente: UTFSM / Comunicaciones - 29/03/2010


Este sitio usa imágenes de Depositphotos