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UTFSM | 2009

Gas radón: ¿Es posible predecir los terremotos?

Hoy se estudian los alcances de este compuesto como posible anticipador de fenómenos naturales (terremotos y erupciones volcánicas) además de su situación como segundo causante de cáncer de pulmón.

Gas radón: ¿Es posible predecir los terremotos?
Comunicado de prensa

Gas radón: ¿Es posible predecir los terremotos?

Poco se sabe sobre el gas radón; por lo menos en Chile. Una de las pocas instituciones en el país que hace mediciones de este compuesto es el Laboratorio de Química Ambiental del Centro de Tecnologías Ambientales (CETAM) de la Universidad Técnica Federico Santa María, trabajo que, junto al estudio de otros componentes en el medio ambiente, es unos de los temas de investigación del proyecto de cooperación internacional entre la Universidad de Extremadura (UEx) de España y la Universidad Santa María; trabajo que llevó a tres especialistas a realizar mediciones de radón y toma de muestras de suelo y rocas en el volcán Chillán.

¿Predicción de fenómenos naturales?

Conrado Miró, Doctor en

Ciencias Físicas y Profesor del Departamento de Física Aplicada de la Universidad de Extremadura, se refirió al origen, efectos y aplicación del gas radón, donde ahondó en la posibilidad de utilizar este gas como herramienta anticipadora de fenómenos naturales como terremotos y turbulencias atmosféricas.

En cuanto a estas últimas, el experto afirmó que existen investigaciones que demuestran cómo el análisis de la evolución del radón en la atmósfera ayuda a dar cuenta de fenómenos de este tipo. Esto, ya que este compuesto se emite de forma constante desde el suelo, y cuando se mantiene un patrón de emisión, indica estabilidad atmosférica.

No obstante, “si hay grandes fluctuaciones de radón, eso nos indica consecuencias de inestabilidades atmosféricas, aumento de la velocidad del viento y cambios anticiclónicos”. Entonces, cuando varía la concentración de radón, se puede interpretar como turbulencia, aspecto que puede correlacionarse con los estudios de contaminación atmosférica.

Pero sin

duda son los últimos estudios y aplicaciones del gas radón los más fascinantes, ya que se enfocan a su variación y presencia inesperada en altas concentraciones como anticipador de terremotos, un sueño aún incumplido por la ciencia, y una fórmula que desde hace años diversos científicos de todo el mundo han estado buscando.

Al igual que en el caso de las turbulencias atmosféricas, el radón evacua desde la superficie constantemente, y ya se ha demostrado que, al efectuarse un terremoto, se produce una inyección potente de gas que proviene desde el suelo. Es decir, se produce un aumento considerable de éste en el ambiente.

“Si somos capaces de medir de forma continua las evacuaciones de radón del suelo, en caso de estabilidad tectónica, esa evacuación de radón debe seguir un patrón aproximadamente constante. Sin embargo, en determinados terremotos, se ha demostrado que hay una inyección brusca de radón hacia la atmósfera, provocada por la aparición de grietas tectónicas que dejan evacuar el radón

con gran intensidad”, señaló Miró.

Es por eso que hoy en día dicho fenómeno se encuentra en estudio y, al parecer, “hay cierta correlación entre conexiones bruscas de radón y la aparición de terremotos”, apuntó Conrado Miró.

Otra aplicación en la misma línea es la utilización de radón como una metodología alternativa a la detección temprana de erupciones volcánicas, técnica que puede complementarse a la utilización de los clásicos sismógrafos.

Es entonces como, tal vez, monitoreando constantemente el radón podría existir la posibilidad de anticiparse a los terremotos y/o erupciones volcánicas, permitiendo de esta manera alertar a la población del fenómeno que se aproxima.

El Radón y sus efectos

El radón es un gas natural radioactivo que proviene de la desintegración del uranio 238, y puede ser encontrado en gran parte de la naturaleza, como en el suelo, el agua, el aire y diferentes tipos de sedimentos. Asimismo, se halla en altas proporciones en materiales de tipo

granítico y ornamental (que tienen alta concentración de uranio), como rocas graníticas y también en ladrillos (entre muchos otros materiales de construcción).

“El radón puede ser perjudicial para la salud del ser humano. Se estima que concentraciones altas de radón podrían inducir cáncer de pulmón. De hecho, después del tabaco, este gas es la segunda causa que puede producir una cierta probabilidad de cáncer de pulmón”.

Pero ¿dónde nos encontramos con altas concentraciones de radón? Comúnmente, el exceso de este compuesto se halla en cuevas, túneles y en algunas viviendas; específicamente en sótanos poco ventilados que estén construidos sobre suelo granítico.

Como comentó el Dr. Francisco Cereceda, de la USM, “el gas radón se puede adsorber en las partículas de polvo respirable y de esta forma entrar a nuestro sistema respiratorio. Por esto, el contacto o la permanencia constante en este tipo de lugares puede causar daños graves en la salud”.

Sin embargo, Conrado Miró afirmó que

solucionar estos problemas no es difícil. Basta con instalar sistemas de evacuación efectivos, ya que el radón se elimina mediante una ventilación adecuada.


Fuente: UTFSM / Comunicaciones - 24/11/2009


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