Fabrizio Beltrametti, biólogo molecular, es CEO de la compañía Actygea (Varese, Italia), especializada en el área, y se encuentra de paso por la Casa de Estudios trabajando en laboratorio junto a estudiantes e investigadores.
El área de la ingeniería genética de bacterias se ha convertido en un importante foco de investigación biotecnológica, en especial por los positivos resultados que ha acarreado para el combate de enfermedades como el cáncer. Es en ese campo donde el biólogo molecular Fabrizio Beltrametti se ha hecho reconocido, convirtiéndose en CEO de la compañía Actygea, con sede en Varese, Italia.
El científico se encuentra por estos días de visita en el Departamento de Química y el Centro de Nanotecnología y Biología de Sistemas de la Universidad Santa María, colaborando con estudiantes e investigadores en la mutación de una cepa microbiana que se encuentra en el laboratorio del Plantel. “Estoy recibiendo consultas y orientándolos para que puedan aprender la técnica y aplicarla a esta y otras cepas”, comenta el experto, quien permanecerá por 25 días en la Casa de Estudios, haciendo especialmente trabajo de laboratorio.
Fabrizio Beltrametti cuenta que su empresa realiza un trabajo de microbiología pura. “Desarrollamos procesos industriales para la producción de compuestos de origen microbiano”, detalla, agregando que entre lo que se puede producir con los microbios “están los antibióticos, los anticancerígenos, los inmunosupresores, es decir, muchas moléculas diferentes que ya se usan o se podrían usar en medicina”.
Por otro lado, también destaca el hecho de que producen enzimas, especialmente para la industria alimentaria y textil. “Y junto a eso, hacemos mucho trabajo de aislamiento de cepas de bacterias y hongos que puedan crecer en cultivos en laboratorios o plantas de producción industrial”.
Experiencia empresarial
Algo que destaca en su trayectoria, es cómo ha conjugado su trabajo científico con las lides empresariales. “Esta visita es realmente importante, porque él tiene mucha experiencia en llevar productos biotecnológicos al mercado”, explica Michael Seeger, académico y director del Laboratorio de Microbiología Molecular y Biotecnología Ambiental y del Centro de Nanotecnología y Biología de Sistemas de la USM. “Y esta experiencia es, además, internacional, porque ha asesorado a muchos grupos de investigación y empresas de distintos países. Por eso, para nosotros, es muy importante poder aprender de sus consejos”.
“Por un lado, está toda su expertise como biólogo molecular, que lo ha hecho conocido en Europa, especialmente por trabajar con microorganismos muy difíciles de modificar genéticamente, como esta bacteria con la que estamos trabajando acá”, señala, “pero además, tiene una gran experiencia en el mercado, como gerente de su empresa, por lo cual sus conocimientos son muy valiosos para todas las investigaciones que se están llevando a cabo acá en la Universidad”.
Específicamente, su trabajo en la USM se trata de deleción de genes de cepas microbianas. La idea es ver si determinados genes están involucrados en la síntesis de antibióticos que producen esa bacteria; si la mutante deja de producir antibióticos, son efectivamente esos genes los responsables de esa producción. “Han elegido varios genes para eso, tanto para biosíntesis como para biodegradación. Es bastante trabajo de biología molecular, ingeniería genética y juntar, cortar ADN, transformando cepas”, detalla el experto italiano. “Trabajé en Alemania en esta cepa y de hecho desarrollé una metodología para hacer el knock out de esos genes”.
Respecto a los avances en medicina, subraya que “ya hay muchas drogas que se pueden obtener de los microorganismos, muchos anticancerígenos. Cada cáncer tiene su historia y para cada tipo hay que usar un anticancerígeno distinto. Aunque ya hay muchos, siempre se necesitan más, entonces el desarrollo de cepas que puedan producir más anticancerígenos es muy importante, así como lo es el desarrollo de aquellas que puedan derivar en nuevos antibióticos, porque hay una evolución de los microbios patógenos, siempre están mutando y volviéndose más resistentes a los antibióticos que existen”.
Es allí donde recae la importancia de una investigación y búsqueda constante de nuevos antibióticos y anticancerígenos producidos por microbios.
Fuente: UNIVERSIDAD TECNICA FEDERICO SANTA MARIA / Comunicaciones - 20/03/2013
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