El Dr. Humberto Cantú, integrante del Consejo Técnico del Premio Nacional de Calidad en México, se reunió con las principales autoridades del Plantel, además de dictar seminarios y charlas para los académicos y profesionales.
El Dr. Humberto Cantú tiene una vasta experiencia en la llamada “cultura de la calidad”. Es autor de dos libros que giran en torno al tema y desde 1999 es miembro del Consejo Técnico del Premio Nacional de Calidad de México, además de haber sido Presidente del Consejo Directivo del Instituto para el Fomento a la Calidad Total, organismo responsable de dicha distinción.
Una labor que lleva a cabo en paralelo a su cargo de Director de la Escuela de Negocios, Ciencias Sociales y Humanidades, del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, y que fue el principal antecedente que lo trajo de visita a la Universidad Santa María, para dialogar y profundizar en los alcances que este término puede tener en el potenciamiento de la gestión universitaria.
Para ello, el Dr. Cantú compartió con las máximas autoridades del Plantel, directores de Departamentos, académicos y profesionales de la Casa de Estudios, dictando seminarios, charlas y participando en reuniones técnicas, todo en el marco de una visita gestionada por la Vicerrectoría Académica de la USM, como parte del proyecto MECESUP FSM1310 “Consolidar la orgánica y metodología institucional para la formulación, ejecución y evaluación de impacto de convenios de desempeño”.
La llamada “Calidad Total” promueve una manera de gestionar poniendo énfasis en la formación del Capital Humano y en la entrega de un servicio, se generan mecanismos administrativos, que a su vez derivan en indicadores que permiten evaluar la efectividad y el impacto de lo que se está haciendo como organización.
La educación como un servicio
Lo primero que reconoció el experto, es que las implicancias que rodean a la Calidad Total pueden generar cuestionamientos, pues gira en torno a servicios y clientes. “Eso remite inmediatamente a un intercambio comercial, que no es lo que ocurre en una universidad, donde lo que existe es una interacción entre personas con el propósito de lograr el desarrollo humano”, admitió, añadiendo inmediatamente que lo que sí puede resultar beneficioso es que “utilizar estas palabras ayuda a concientizar el hecho de que precisamente la razón de ser de una universidad, es brindarle un servicio a alguien, el cual está asociado a lo más valioso que puede tener una persona, que es su propia formación y transformación como tal”.
En ese sentido, afirmó que “una vez que se supera el “trauma” de asociarlo a la empresa comercial, es posible enfocarse desde otro lugar, que es ver a las personas con las que trabajas como alguien a quien hay que servir y con quien hay que consensuar necesidades, y esa es la razón de ser de un profesor, administrativo o funcionario”.
Insertas en un contexto global de constante intercambio, las universidades hoy compiten no solo por alumnos nacionales, sino también extranjeros. Una obligación de innovar que se potencia gracias a las cada vez más numerosas alternativas educacionales, que les permiten a los jóvenes adquirir las competencias que requieren sin pasar por una institución formal.
En medio de este complejo escenario, el académico subrayó que no basta con “formar a un estudiante que solo cuente con conocimientos técnicos; lógicamente los debe tener, y en un muy buen nivel, competitivo, pero a la vez debe ser un alumno que comprenda lo que ocurre en la sociedad, su rol como ciudadano, que sepa que tiene la capacidad de cambiar cosas, emprender otras nuevas y tener un comportamiento ético en su actuar en el futuro. Esas son las competencias que perduran, el conocimiento se vuelve rápidamente obsoleto”, manifestó.
El Dr. Cantú señaló que, en ese contexto, el principal reto de un Plantel como la USM, “de tanta reputación en el área técnica, es no perder de vista que se están formando seres humanos, no solo ingenieros”. Esto, pues está comprobado que los programas de esta línea tienen como característica el atraer a los alumnos más brillantes, “pero la tarea de la universidad es complementar esa calidad técnica, forjando alumnos más humanos y conscientes del rol de liderazgo que tendrán en el futuro en la sociedad”.
Colaboración y sinergia
En tanto, el Vicerrector Académico de la USM, Dr. Eugenio González, director del proyecto y anfitrión de la actividad, señaló que los seminarios y actividades desarrolladas en conjunto con el Dr. Cantú han contribuido a que autoridades superiores, directores de departamentos, líderes de proyectos y profesionales de distintas unidades “profundicemos en los elementos estratégicos y operacionales que permiten consolidar nuestro sistema de gestión de estratégica institucional y mejoramiento continuo”.
Un aspecto relevante y a destacar que se ha dado durante estos días, ha sido la actitud colaborativa y sinérgica de todos los participantes en los talleres. “Así, es posible evidenciar que el compromiso de nuestras personas y equipos es la principal fuerza motriz de nuestra institución y por lo tanto, es necesario continuar avanzando para fortalecer el vínculo estratégico de la administración central y las unidades de la USM, todas estas acciones con el permanente liderazgo de la VRA, en pos de fortalecer la calidad y la eficiencia institucional, identificando metas claras, útiles y pertinentes a nuestra visión de futuro”.
Fuente: UNIVERSIDAD TECNICA FEDERICO SANTA MARIA / Comunicaciones - 25/05/2015
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