Consumismo. Crecimiento económico, decrecimiento ecológico

Consumismo. Crecimiento económico, decrecimiento ecológico

Consumismo

Crecimiento económico decrecimiento ecológico

Andrés Fernando Orozco Macías

Historiador

Pienso luego existo –ya no es tan convincente-; las sociedades de consumo nos han enseñado que existo porque también puedo ser pensado: Compro luego existo y mi existencia se hace fáctica en el hecho de la compra.

Los medios de comunicación programan la cultura y las instituciones la regulan, los comportamientos y la existencia son válidos mientras estén vigentes en las sociedades de consumo institucionalizadas, de lo contrario será invalidadas o coaccionadas.

A partir de los años 70 del siglo XX la maduración de la economía de mercado o capitalismo inicia ya no una relevante lucha de clases, sino, una lucha

conceptual en los medios de comunicación, una continua reformar en la terminología del sistema creciente y globalizado. Al capitalismo se le llamo economía de mercado y lo que Lenin llamo Imperialismo los capitalistas lo llamaron capital financiero, los medios de comunicación y la profesionalización de la publicidad comercial hizo la segunda parte de esa lucha conceptual, definir que era bueno y adecuado para el consumo diario, ofreciendo nuevos productos y necesidades, dando una transformación radical tanto a la forma tradicional de consumir como también al nivel de consumo de los occidentales.

Los medios de comunicación sin duda tienen un impacto sobre la vida de los consumidores, donde ponen en una función reactiva a su mente en el proceso de adaptación a las formas de consumo, dando una transformación cultural y terminológica a la aparición de los insaciables consumidores de inicio de los años 70.

No hay duda que la publicidad comercial a partir de los años de 1960  creció al ritmo de la

tecnología y la progresiva globalización del mercado. Los medios de comunicación y la propaganda instituyen cultura, creando Lógicas colectivas inconscientes por medio de Imágenes, dando realidades e identidades colectivas, jugando con los estados emocionales de los diferentes grupos de consumidores, creando en esas lógicas imaginarios sociales y significativos valores culturales: en los cuales se teme, se ama, se sueña, se desea etc, mientras la búsqueda en la compra ofrece confort y bienestar. La tradición de las compras sufrió una degeneración con el consumismo llevando a que en el momento de la compra lleves mucho más de lo requerido, pasando de una cultura de necesidades a una cultura del deseo, donde los deseos del hombre sobrepasaron en definitiva sus necesidades, poniendo el consumo a nivel del consumismo, haciendo de los objetos que cubren esos deseos y necesidades fácilmente gaseosos ante la vista de uno más moderno.

 El consumismo de la segunda mitad del siglo XX, se caracterizo por la

compra de productos no necesarios y rápidamente sustituibles por otros, igualmente innecesarios y poco perdurables, con el fin de mantener la producción y el incremento, hemos llegado a tal punto en que se ha perdido la línea divisoria entre lo que puede ser realmente útil para nuestras vidas y lo que no tiene ningún carácter fundamental, pero lo que es necesario o no, parece que no lo definimos nosotros, sino los mismos medios de comunicación.

Los bienes de consumo que se producen hoy en día tienen un periodo de vida más gaseoso, en la actual sociedad de consumo, los productos se renuevan cada vez más rápido y es que su clave está en hacerlos cada vez más desechables. Este sostenimiento productivo sigue llevando al planeta a devastadores problemas ecológicos como la aniquilación de la vegetación, la destrucción de tierras fértiles y la contaminación de ríos y playas de igual manera a una degradación de la vida sanitaria de los seres vivos también a la alteración sicológica de los seres humanos.

La

sociedad de consumo se vuelve una sociedad del desperdicio, donde ya está completamente programado de los objetos, entre más corto sea su durabilidad, mas podrá incrementar su producción, mientras tanto las cifras aumentan, consumimos casi un 50% de recursos naturales más que hace 30 años.

Fuente: ACTIVISMO ECOLóGICO / Andres Fernando Orozco Macias - 06/02/2012