Tras el reciente temporal que azotó a las costas de la región, se cuestionó la aprobación de los permisos de edificación a la inmobiliaria a cargo de este millonario proyecto turístico. Sebastián Amaro, docente de USM Viña del Mar, analiza el escenario de la construcción en zonas inundables.
Varios años han transcurrido desde que por primera vez algunas agrupaciones ciudadanas se manifestaran en contra de la construcción de un importante proyecto inmobiliario, el cual estaría emplazado en un sector densamente rocoso y a orillas del mar, en el camino que una a Reñaca y Concón. Se trata de Punta Piqueros, un lujoso hotel 5 estrellas de 20 mil metros cuadrados y que contará con un total de 143 habitaciones en sus nueve pisos.
Aunque actualmente el proyecto cuenta con la aprobación de las autoridades competentes en la materia –tras el Comité de Ministros liderado por el titular de la cartera de Medio Ambiente- y el respaldo de la Resolución de Calificación Ambiental, la polémica se reabrió tras el temporal de lluvia y viento que afectó a la Región de Valparaíso, dejando una vasta zona del litoral con secuelas estructurales a raíz de la fuerza de las aguas.
El docente del Departamento de Construcción y Prevención de Riesgos de la USM Viña del Mar, Sebastián Amaro, interpreta estos hechos a partir de los fenómenos de la naturaleza asociados al cambio climático, ya que “se debe considerar que el último temporal obligará a replantear muchos proyectos de edificación en costa dado que, según se proyecta, estos fenómenos de gran intensidad asociados al cambio climático global no serían en adelante la excepción sino más bien la regla; se debe recordar el caso del huracán Catarina que, en un evento inédito, bajó hasta las costas de Brasil en 2004, por tanto y sin decir que seremos victimas de huracanes, nadie puede descartar que eventos de magnitudes no previstas se vuelvan a registrar en nuestras costas”, señala.
Respecto a uno de los aspectos más controversiales de este debate, cree que la aprobación del Comité de Ministros y el respaldo de la Resolución de Calificación Ambiental, en parte se deben a que “no tenemos historia ni estadísticas en este tipo de eventos, algo similar le ocurrió a Japón con su terremoto de marzo de 2011, en donde todos los terremotos anteriores habían sido de magnitudes bastante más bajas y por tanto las centrales nucleares se diseñaban para esa estadística de eventos”.
Asimismo, aunque para el profesor Sebastián Amaro se trata de un caso excepcional, de todas formas se debe actuar preventivamente y, de hecho, afirma que “no debiésemos considerarlo un hecho único e irrepetible sino que todo lo contrario”.
Luego del tsunami de 2010, una de las recomendaciones fue evitar la edificación en los sectores cercanos a la costa, como medida preventiva ante posibles eventos de estas características. En ese sentido, el profesor del Departamento de Construcción y Prevención de Riesgos de la USM Viña del Mar explica que “el desarrollo de proyectos turísticos en zonas inundables se debe realizar con el debido cuidado y coordinación para enfrentar estas eventualidades, centrando el análisis en la vida de las personas y su evacuación adecuada en caso de tsunamis; considerando el evento temporal de gran intensidad, considero prudente tomar la experiencia vivida para el desarrollo futuro y además hacer intercambio de experiencias con culturas familiarizadas con eventos aún más devastadores, como países fuertemente turísticos con presencia de huracanes”, concluye.
Fuente: SEDE VIñA DEL MAR / Universidad Técnica Federico Santa María - 19/08/2015
GuiaPlaza.com no se hace responsable de la información que contiene esta nota y no asume responsabilidad alguna frente a terceros sobre su íntegro contenido, quedando igualmente exonerada de la responsabilidad de la entidad autora del mismo. El autor puede solicitar su eliminación a través del formulario de contacto.
